¿Qué es, para qué sirve y cómo establecer objetivos SMART?

¿Qué son los objetivos SMART?

Los objetivos SMART o "inteligentes" se trata de una metodología que prioriza la determinación de metas de equipo en base a objetivos elegidos de forma estratégica que sean realizables por la organización.

En otras palabras, identifican aquellos puntos esenciales para el avance del grupo en base a condiciones específicas que puedan servir como un mapa de crecimiento para la empresa.

SMART es un acrónimo de Specific (específicos), Mesuarable (medible), Attaible (alcanzable), Relevant (relevante) y Timely (a tiempo).

Lo que quiere decir que los objetivos SMART lo que buscan es a escogencia de objetivos empresariales que sean:

  • Específicos: que se estén dirigidos hacia un área o tarea en particular.
  • Medibles: basados en KPIs de la empresa que sirvan para medir la eficiencia y mejorar la toma de decisiones.
  • Alcanzables: pensando en la situación actual de la organización para asegurar una probabilidad de éxito grande.
  • Relevantes: es decir, que sean de real interés para la empresa y que la orienten hacia un mayor crecimiento y evolución.
  • A tiempo: con una fecha de caducidad.

¿Para qué sirven los objetivos SMART?

La metodología es capaz de guiar a una organización hacia diversos beneficios como:

Mejorar la visión de negocios

Reconocer las fortalezas, debilidades y, en general, la realidad de un negocio permite tomar decisiones acertadas y contextualizadas para ir optimizando cada área.

Al establecer objetivos inteligentes en lugar de solo determinar algunas metas sin mucha información sobre si son logrables o no, tendrás en tus manos un mapa en base a una perspectiva amplia y detallada de los elementos, recursos y acciones necesarias para llegar a ellos.

Priorizar lo importante sobre lo urgente

Muchas empresas que vemos allá afuera, basan el día a día de sus operaciones en "apagar fuegos" que ocurren en sus procesos. Estas organizaciones, al ocupar una parte importante de sus recursos en tareas urgentes, se olvidan de invertir en aquello que los hará crecer en lugar de sostenerse.

Los objetivos SMART en ese sentido, ayudan a identificar aquellas iniciativas que se tienen que llevar a cabo, cómo y con qué fin.

Gracias a esto, un gerente o tomador de decisiones podrá enfocar sus acciones en las cosas que darán resultados, evitando que las distracciones diarias provoquen un desperdicio de recursos que no llevan a ningún lado excepto el fracaso.

Control generalizado

Al tener claro cuáles son los objetivos que llevarán a la empresa hacia el éxito, podrás distribuir los recursos materiales, humanos y financieros exactamente en las acciones que beneficiarán a tu organización.

Algo que te brindará un mayor control de la economía de la empresa y del talento humano disponible.

Mejorar la rentabilidad

Cualquier negocio allá afuera busca, sea como sea, su rentabilidad. Al usar los objetivos SMART como parte de tu core business, se accede a una metodología de mejora continua, que agiliza las operaciones al clarificar el terreno de juego para todos los actores y se adquiere a un perfil estratégico que contribuya con la fluidez de las operaciones.

Sin dudas, a través de esta iniciativa garantizarás que todo su equipo "reme" hacia la misma dirección, favoreciendo la productividad, la eficiencia y la optimización en cada área de tu negocio.

¿Cómo definir tus objetivos SMART?

Como sabemos muy bien que, en oportunidades, aprender a hacer algo leyendo la teoría no es lo mejor. Te explicaremos el paso a paso para determinar tus objetivos SMART a través de un ejemplo de una empresa que busca mejorar la conversión de leads a clientes en su estrategia de Marketing de Contenidos.

Objetivos específicos

Un objetivo específico quiere decir que no exista la ambigüedad; lo que es lo mismo: objetivos claros y detallados sobre una tarea en concreto.

Para lograrlo, tienes que identificar:

  • qué quieres lograr;
  • principales obstáculos;
  • quién es el responsable de llevarlo a cabo;
  • dónde se ejecutarán las tareas.

Por ejemplo: aumentar en 20% los clientes provenientes de acciones de lead nurturing.

Objetivos medibles

Sin la medición de los avances es imposible saber si funcionan las nuevas estrategias. Un objetivo SMART debe ser, sin lugar a dudas, cuantificable para dibujar la cima de la montaña.

Por ejemplo: a través del CTR de emails en el fondo del embudo.

Objetivos alcanzables

Un objetivo alcanzable o realista se define como un resultado que se obtendrá muy probablemente si se ejecutan diversas acciones.

Ellos ayudan a los colaboradores de la empresa a seguir adelante, sin embargo, deben estar basados en la realidad operacional y las capacidades que posee la organización, por ello es importante responder:

  • ¿Cómo se puede alcanzar la meta?
  • ¿Qué probabilidad existe de que sea alcanzable?

Por ejemplo: promedio de leads dentro del embudo por campaña o cantidad de leads para una campaña en particular.

Objetivos relevantes

Para ser relevante, un objetivo tiene que estar aliado con la estrategia general de la organización, por lo que vale la pena considerar:

  • ¿Por qué es relevante?
  • ¿Es importante para la estrategia?
  • ¿Nos encontramos en el momento adecuado para ello?
  • ¿Contamos con el capital humano necesario?
  • ¿Se adapta al contexto actual?

Por ejemplo: para mejorar la relación leads-conversiones dentro del embudo.

Objetivos con tiempo límite

Por último, un objetivo SMART está determinado por un fecha límite que le da el carácter de importante dentro de las acciones de la organización, para ello pregúntate:

  • ¿Cuándo necesito tener estos objetivos cumplidos?
  • ¿Qué existe pendiente en la organización?
  • ¿Dónde veo a la empresa en seis meses?

Por ejemplo: próximo trimestre.

¡Ya estableciste tus objetivos SMART!

Fuente: Shopify